En 2018, Talitha Qum profundizó su camino hacia la organización y el fortalecimiento institucional. Se sistematizaron experiencias, se digitalizó información y se crearon proyectos y protocolos propios, dando voz y forma a la memoria viva del Programa. Destacó la implementación del proyecto “Un viaje a través de la vida”, que educó a niñas, familias y comunidad sobre la trata de personas. El equipo interdisciplinar creció con nuevos profesionales, mejorando los procesos de acompañamiento. El arte se convirtió en herramienta transformadora con el primer musical preventivo. Fue un año de conciencia, creatividad y estructura, donde cada acción fortaleció raíces y propósito.
Durante 2018, se enfocó en optimizar sus procesos internos y consolidar su memoria histórica a través de la gestión de información y la digitalización de experiencias. En este año se elaboraron productos propios –como proyectos, protocolos de prevención y sistematizaciones– que permitieron perfeccionar la visibilización a nivel local, nacional e internacional, aprovechando además las capacidades artísticas y culturales de las niñas.
Se implementó el proyecto de prevención a la trata de personas, denominado “Un viaje a través de la vida”, el cual capacitó a niñas, adolescentes, familias y miembros de la comunidad en estrategias para enfrentar este grave riesgo. Asimismo, se fortaleció el equipo interdisciplinar mediante la contratación de personal psicosocial y pedagógico y se aplicaron baterías de evaluación de desempeño para mejorar los procesos de acompañamiento.
En el ámbito creativo, se destacó el montaje del primer musical enfocado en la prevención de la trata de personas, una estrategia que unió el arte con la acción preventiva. La elaboración rigurosa y digitalizada de informes permitió documentar de manera sistemática todas las acciones, evidenciando el compromiso con la eficiencia y la construcción de una memoria histórica sólida.